Las pantallas táctiles, cada vez más comunes en la tecnología personal, presentan desafíos considerables para los adultos mayores, especialmente al realizar tareas de conducción. Aunque se suele asumir que las dificultades de los mayores con estas interfaces se deben a su falta de familiaridad con la tecnología, un estudio reciente sugiere que podría haber barreras fisiológicas involucradas. En una investigación, se pidió a participantes mayores y jóvenes que interactuaran con una pantalla táctil mientras conducían. Los adultos mayores fallaron más frecuentemente en sus intentos de presionar un botón en la pantalla, incluso cuando lo hacían con la fuerza y duración adecuadas. Esto indica que podría existir una razón fisiológica relacionada con la edad que afecta la capacidad de los adultos mayores para interactuar exitosamente con pantallas táctiles.

Desde su desarrollo inicial, las pantallas táctiles se han vuelto omnipresentes en dispositivos como smartphones, portátiles y tabletas. Su interfaz dinámica ofrece ventajas sobre los diseños estáticos de teclados y ratones. Sin embargo, estas interfaces también presentan dificultades, especialmente para los adultos mayores, quienes pueden sentirse menos capaces y menos dispuestos a adoptar esta tecnología. Los resultados experimentales sobre el efecto de la edad en la respuesta electrodermal y los niveles de conductancia de la piel son variados, lo que sugiere que esta área podría beneficiarse de estudios adicionales. En este contexto, se analizó el rendimiento de adultos mayores y jóvenes en una tarea secundaria con pantalla táctil durante una simulación de conducción, revelando diferencias significativas en la interacción con la tecnología.

Gráfico de caja y bigotes que muestra la relación de aciertos y fallos (Hit:Miss Ratio) por grupo de edad. El eje X representa los grupos de edad ("Younger" para jóvenes y "Older" para adultos mayores), mientras que el eje Y representa la proporción de aciertos. El grupo de jóvenes tiene una proporción de aciertos consistentemente alta, cercana a 1, con poca variación. En contraste, el grupo de adultos mayores muestra una proporción más baja y mayor dispersión en los datos, con algunos valores significativamente más bajos.

El estudio utilizó un simulador de conducción y una tableta con pantalla táctil para representar una tarea secundaria en el vehículo. Los participantes, tanto adultos mayores como jóvenes, debían presionar un botón en la pantalla para completar la tarea. Los resultados mostraron que los adultos mayores tenían una proporción significativamente mayor de fallos en comparación con los jóvenes. Además, se observó que las condiciones de viento y las instrucciones de prioridad afectaban de manera diferente a ambos grupos. Los adultos mayores mostraron una mayor dificultad en condiciones de alta frecuencia de viento y cuando se les pidió que priorizaran de manera equitativa la conducción y la tarea secundaria.

La investigación sugiere que los adultos mayores enfrentan desafíos adicionales al usar pantallas táctiles, posiblemente debido a cambios fisiológicos relacionados con la edad, como la piel seca o más gruesa, que pueden afectar la conductividad eléctrica necesaria para que las pantallas táctiles registren el contacto. Estos hallazgos subrayan la importancia de considerar la diversidad etaria en el diseño de tecnologías, especialmente aquellas destinadas a ser utilizadas en vehículos. Incluir a adultos mayores en la investigación de usabilidad de nuevas interfaces puede ayudar a desarrollar productos que sean accesibles para todas las edades, minimizando el riesgo de frustración y desuso de estas tecnologías por parte de los usuarios mayores.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí