La batería de arena, desarrollada por científicos de la Universidad de Chalmers en Suecia, utiliza granos de arena como material de almacenamiento. Funciona mediante la conversión de la electricidad en calor, que se almacena en la arena a una temperatura de hasta 600 grados Celsius. Este calor puede liberarse cuando sea necesario para calentar agua y generar calefacción para edificios residenciales y comerciales. Además, el proceso de almacenamiento de energía en la arena es altamente eficiente y puede ser una solución rentable para áreas que buscan reducir su dependencia de combustibles fósiles. Con esta tecnología, se abre la puerta a nuevas formas de aprovechar la energía renovable y reducir las emisiones de carbono en el sector de la calefacción urbana.
En un notable avance para la tecnología de almacenamiento de energía, una startup finlandesa ha asegurado una financiación semilla de 7,6 millones de euros (aproximadamente 8,2 millones de dólares) para escalar su innovadora tecnología de baterías de arena. Este capital será destinado a expandir los equipos de ventas e investigación y desarrollo de la compañía, con el objetivo de avanzar las capacidades de esta prometedora tecnología.
La batería de arena, una solución ingeniosa para el almacenamiento de energía, utiliza arena o materiales similares como medio para almacenar energía en forma de calor. Su función principal es actuar como un depósito de alta capacidad para el excedente de energía eólica y solar. Está compuesta por un silo aislado repleto de arena, equipado con tuberías para la transferencia de calor y tecnología capaz de convertir la electricidad en calor. Cuando se requiere, el calor puede ser extraído del sistema para una variedad de aplicaciones.
Una de las grandes ventajas de este sistema es que no depende de materiales exóticos. La compañía afirma que el tamaño de grano de la arena no es un factor crítico, prefiriendo utilizar materiales que no son comúnmente empleados en la industria de la construcción.
Polar Night Energy, la empresa detrás de esta innovación, instaló su primera batería de arena en la red de calefacción distrital de Vatajankoski, en Kankaanpää, Finlandia, que entró en servicio en 2022. Esta batería proporciona 100 kW de potencia de calefacción y una capacidad de 8 MWh.
Recientemente, Polar Night Energy anunció una colaboración con la compañía finlandesa de calefacción distrital Loviisan Lämpö para construir una batería de arena a escala industrial en Pornainen. Esta unidad, de aproximadamente 13 metros de alto por 15 metros de ancho, tardará poco más de un año en construirse y probarse.
Una vez operativa, la batería más grande podrá almacenar hasta 100 MWh de energía térmica y proporcionar 1 MW de potencia de calefacción. En Pornainen, esto se traducirá en una semana completa de suministro de calor en invierno y casi un mes durante el verano.
El interior de la batería puede calentarse a más de 1,000 grados Celsius, generalmente limitado por la resistencia al calor de los materiales utilizados en la construcción del almacenamiento. Polar Night Energy ha indicado que su sistema de almacenamiento también puede construirse bajo tierra, siendo ideal para regiones donde el espacio es altamente valorado.