Gráfico de espectroscopía que muestra las longitudes de onda de luz reflejada en la superficie de Caronte, la luna más grande de Plutón, obtenidas por el Telescopio Espacial James Webb (línea blanca) y la misión New Horizons de la NASA (línea rosa). En el eje horizontal, se representa la longitud de onda de la luz en micrómetros (μm), mientras que el eje vertical muestra la cantidad de luz dispersada en porcentajes. Las zonas sombreadas indican la presencia de diferentes compuestos: agua en forma de hielo (H₂O) alrededor de 1.5-2.5 μm, dióxido de carbono (CO₂) entre 3 y 4.3 μm, y peróxido de hidrógeno (H₂O₂) alrededor de los 3.5 μm. La imagen de fondo muestra a Caronte, destacando su superficie helada. Este gráfico revela la composición de Caronte, específicamente la presencia de hielo, dióxido de carbono y peróxido de hidrógeno.

El Telescopio Espacial James Webb revela nuevos compuestos en Caronte, la luna helada de Plutón

Gracias al Telescopio Espacial James Webb (JWST), un equipo de astrónomos ha detectado por primera vez dióxido de carbono (CO2) y peróxido de hidrógeno (H₂O₂) en la superficie helada de Caronte, la luna más grande de Plutón. Este hallazgo podría ofrecer una mejor comprensión sobre el origen y la evolución de Caronte y otros cuerpos helados en los confines del sistema solar.
Un diagrama explicativo del proceso ZeroCAL para la producción de cemento con bajas emisiones de carbono. En el centro, se muestra la descomposición de la piedra caliza (CaCO3) en una solución acuosa, evitando la liberación de dióxido de carbono. El proceso utiliza energía renovable y agua de mar, representado por flechas, para generar hidróxido de calcio (Ca(OH)2) o Portlandita, un precursor para la fabricación de cemento. También se produce hidrógeno verde (H2), que se libera en la parte superior del diagrama. Abajo, el CO2 generado se inmoviliza en formas seguras de HCO3- y CO3^2-, lo que permite su gestión. A la izquierda, se representa la cantera de caliza, mientras que a la derecha, se ilustra el proceso final de fabricación de cemento.

Investigadores de UCLA desarrollan un cemento con un 98% menos de emisiones de CO2

Tras una década de trabajo, un equipo de investigadores de la Universidad de California, Los Ángeles (UCLA) ha logrado crear un método para producir cemento con un 98% menos de emisiones de dióxido de carbono (CO2) en comparación con los métodos tradicionales. Este avance podría tener un impacto significativo en la reducción de las emisiones globales de gases de efecto invernadero.
Chimenea industrial expulsando una columna de humo blanco contra un cielo azul claro, representando la emisión de gases a la atmósfera.

Nuevo material a base de madera captura y libera carbono bajo demanda

Investigadores del FAMU-FSU College of Engineering han desarrollado un material innovador a base de biomasa reutilizable que tiene la capacidad de capturar y liberar dióxido de carbono (CO2), según un estudio publicado en Advanced Materials. Este avance en la ciencia de materiales podría ofrecer una solución efectiva y sostenible para mitigar las emisiones de carbono, un desafío global urgente.

Avances en terapia génica, captura de CO2, inteligencia artificial en el soporte emocional adolescente, estructuras moleculares y regulación del sistema inmunitario

En este episodio, comenzaremos con un estudio pionero en el Reino Unido donde se ha logrado restaurar la audición de una niña a través de terapia génica. Luego, analizaremos cómo la planta de captura de dióxido de carbono más grande del mundo en Islandia está avanzando en la lucha contra el cambio climático. También discutiremos el impacto emocional y social de los chatbots de inteligencia artificial entre los adolescentes, las nuevas fronteras en el modelado de estructuras moleculares con AlphaFold 3, y el descubrimiento de un mecanismo en el cerebro que regula la respuesta inmunitaria. Únete a nosotros para entender estos desarrollos y sus implicaciones en la tecnología moderna.

La planta de eliminación de carbono más grande del mundo está aquí

La planta "Mammoth", ubicada en Hellisheiði, Islandia, se ha convertido en la instalación industrial más grande construida hasta la fecha para la captura de dióxido de carbono directamente del aire. Operada por la compañía suiza Climeworks, la planta ya cuenta con clientes de renombre como JPMorgan Chase, Microsoft, Stripe y Shopify, entre otros.