Los investigadores han encontrado inspiración en las tortugas marinas para desarrollar un sistema innovador de monitoreo cardíaco. Estos animales, que escuchan bajo el agua a través de la piel en lugar de orejas externas, han llevado a un avance en la tecnología médica gracias a su sistema auditivo único que detecta vibraciones a través de una capa de piel y grasa.
En un reciente estudio llevado a cabo por Junbin Zang, profesor de la Universidad del Norte de China, y su equipo, se ha creado un sensor cardíaco que imita el mecanismo auditivo de las tortugas marinas. Este sensor, diseñado en forma de T similar a los huesos del oído de las tortugas, utiliza un haz de cantilever MEMS (sistemas microelectromecánicos) para captar las vibraciones sonoras, que se traducen en señales eléctricas.
![](https://spectrum.ieee.org/media-library/a-device-consisting-of-a-circle-with-a-chip-on-top-and-a-mushroom-shaped-blue-sensor-standing-upright-on-it.jpg?id=52142056&width=1200&height=750)
Este sensor no solo ha mostrado una alta sensibilidad a las vibraciones, sino que también ha sido probado con éxito en humanos, donde pudo detectar eficazmente las dos fases del latido del corazón. Los resultados de estas pruebas, publicados el 1 de abril en el IEEE Sensors Journal, sugieren un gran potencial para su uso en la monitorización de la salud cardíaca desde casa, permitiendo así pruebas más frecuentes y accesibles.
Aunque el dispositivo actualmente capta una cantidad significativa de ruido de fondo, el equipo de investigación planea mejorar esta característica. Su objetivo a largo plazo es integrar este sensor bioinspirado en dispositivos portátiles y vestibles, además de en versiones más grandes para uso hospitalario, para la detección simultánea de señales de electrocardiograma y fonocardiograma.