Un nuevo material con estructura de nanoflores, similar a un clavel, podría utilizarse en vendajes para mejorar la curación de heridas. Según un estudio publicado en ACS Applied Bio Materials, estos vendajes recubiertos con nanoflores han demostrado propiedades antibióticas, antiinflamatorias y biocompatibles en pruebas de laboratorio. Los investigadores sugieren que estos vendajes, compuestos por ácido tánico y fosfato de cobre(II), son candidatos prometedores para tratar infecciones y condiciones inflamatorias.
Las nanoflores son estructuras diminutas que se ensamblan por sí mismas, pero su gran superficie permite la adhesión de moléculas de fármacos, lo que las hace especialmente adecuadas para la administración de medicamentos. En el desarrollo de estos vendajes, los investigadores, liderados por Fatemeh Ahmadpoor y Pier Francesco Ferrari, seleccionaron fosfato de cobre(II) y ácido tánico debido a sus propiedades antibióticas y antiinflamatorias.
Tras cultivar las flores en una solución salina, las estructuras bioinspiradas se adhirieron a tiras de tela de nanofibras electrohiladas. En las pruebas, los vendajes recubiertos con nanoflores inactivaron una amplia gama de bacterias cultivadas, incluyendo E. coli, Pseudomonas aeruginosa y Staphylococcus aureus, así como sus biopelículas resistentes a antibióticos, eliminaron especies reactivas de oxígeno y no dañaron células humanas cultivadas en laboratorio.
Ahmadpoor y Ferrari afirman que estos vendajes representan un avance significativo al ofrecer una solución natural, rentable y altamente eficiente para combatir infecciones y acelerar la curación de heridas, con el potencial de redefinir los estándares de tratamiento. Esta innovación podría cambiar la manera en que se abordan las infecciones y la inflamación en el ámbito médico.