El primer ministro de Ontario, Doug Ford, anunció la cancelación de un contrato de casi 100 millones de dólares con Starlink, la empresa de internet satelital de Elon Musk. Este acuerdo, firmado en noviembre, tenía como objetivo llevar internet de alta velocidad a 15.000 hogares y negocios en comunidades rurales, remotas y del norte de la provincia para junio de este año. La decisión de Ford se produce tras la imposición de aranceles del 25 % a casi todos los bienes canadienses por parte del gobierno de Estados Unidos.
Ford justificó la cancelación señalando que Musk es parte del equipo de Donald Trump, a quien acusó de querer perjudicar a las familias y negocios canadienses. En respuesta, Musk reaccionó de manera escueta en su plataforma X, escribiendo: «Oh well» (Oh, bueno). Ford también anunció que Ontario prohibirá la participación de empresas estadounidenses en contratos provinciales hasta que se eliminen los aranceles, lo que, según él, representará pérdidas de ingresos por decenas de miles de millones de dólares para estas compañías.
El contrato con Starlink había sido criticado previamente por la líder liberal de Ontario, Bonnie Crombie, quien exigió su cancelación, argumentando que Ford no estaba realmente enfrentándose a Trump. En su momento, Ford defendió el acuerdo, afirmando que fue resultado de un proceso de licitación transparente y que formaba parte del plan gubernamental para garantizar acceso a internet en toda la provincia. Sin embargo, el lunes declaró que Ontario aún no había realizado ningún pago y que contaban con un sólido argumento legal si el caso llegara a los tribunales. No obstante, expertos advierten que la ruptura del contrato podría acarrear sanciones económicas, dado el poder de negociación de Musk.
Según Infrastructure Ontario, en enero de 2024 solo dos proveedores de internet satelital podían cumplir con los requisitos del contrato: Starlink, de SpaceX, y Xplore Inc., una empresa canadiense propiedad del fondo estadounidense Stonepeak. SpaceX resultó ganadora en el proceso de licitación. Starlink se convirtió en el proveedor líder de internet satelital en Canadá en 2022 y, para 2024, ya contaba con unos 400.000 suscriptores en el país. Ford justificó la elección de Starlink alegando que Xplore Inc. no tenía la infraestructura lista y que su servicio tardaría al menos dos años más en estar disponible.
La decisión de Ford generó reacciones mixtas. Susan Church, directora ejecutiva de Blue Sky Economic Growth Corporation, respaldó la medida, afirmando que era una forma de «enfrentarse a un abusón» y que Ontario encontraría alternativas para conectar a las comunidades rurales. Por otro lado, líderes de la oposición, como Mike Schreiner (Partido Verde), Bonnie Crombie (Partido Liberal) y Marit Stiles (NDP), criticaron el acuerdo con Starlink desde el inicio y celebraron su cancelación. Schreiner afirmó que nunca debió firmarse un contrato exclusivo con Musk, mientras que Crombie calificó la inversión como un despilfarro, argumentando que Ontario tiene su propia tecnología. Stiles subrayó la necesidad de una alternativa canadiense para garantizar el acceso a internet en las comunidades afectadas.