La era de las contraseñas está llegando a su fin, y Microsoft está a la vanguardia de este cambio, promoviendo el uso de claves de acceso como una alternativa más segura y eficiente. Los ataques relacionados con contraseñas están en aumento, y Microsoft bloquea actualmente 7,000 ataques por segundo, casi el doble que el año anterior. Sin embargo, las claves de acceso ofrecen una solución robusta a estos problemas, permitiendo un inicio de sesión más rápido mediante reconocimiento facial, huella dactilar o PIN, y eliminando la necesidad de recordar contraseñas o utilizar códigos de un solo uso.

En mayo de 2024, Microsoft anunció la posibilidad de iniciar sesión en aplicaciones y servicios como Xbox y Microsoft 365 utilizando claves de acceso. Este cambio representa un desafío significativo: convencer a más de mil millones de personas de adoptar esta nueva tecnología. Para lograrlo, Microsoft implementó una estrategia de introducción gradual, comenzando con pequeñas pruebas y escalando rápidamente. Los resultados han sido prometedores, mostrando que el inicio de sesión con claves de acceso es tres veces más rápido que con contraseñas tradicionales y que los usuarios tienen un 98% de éxito al registrarse con claves de acceso, frente al 32% con contraseñas.

El proceso de implementación de las claves de acceso ha implicado experimentación y ajustes continuos. Microsoft ha trabajado para integrar las claves de acceso en su experiencia de usuario, facilitando su registro y uso. Se ha descubierto que los usuarios responden positivamente a las invitaciones para registrar claves de acceso, especialmente cuando se les presenta como una opción más rápida y segura. Aproximadamente el 25% de los usuarios que reciben una invitación para registrarse con claves de acceso interactúan con ella, superando las expectativas iniciales de la compañía.

A medida que la adopción de las claves de acceso se expande, Microsoft ha rediseñado su experiencia de inicio de sesión para priorizar este método. Si un usuario tiene una clave de acceso disponible, se presenta como la opción predeterminada, simplificando el proceso y mejorando la seguridad. Este enfoque ha llevado a una disminución del 10% en el uso de contraseñas y un aumento del 987% en el uso de claves de acceso. Microsoft planea seguir promoviendo las claves de acceso a nivel global, invitando a nuevos usuarios a registrarse al crear cuentas y a los usuarios existentes en momentos clave como después de iniciar sesión o durante un restablecimiento de contraseña.

Una ilustración en forma de montaña que representa el progreso hacia la eliminación de contraseñas. En la base, se encuentra el punto "Passwordless accounts" (Cuentas sin contraseñas), seguido por "Support passkeys" (Soporte para claves de acceso), "Passkeys by default" (Claves de acceso por defecto), "Passwords not supported" (Contraseñas no admitidas) y, en la cima, "Phishing-resistant credentials only" (Solo credenciales resistentes al phishing). Cada etapa está marcada con un punto amarillo y conectada por una línea punteada, simbolizando el avance hacia una mayor seguridad.

La transición hacia un futuro sin contraseñas es un objetivo ambicioso para Microsoft, que busca eliminar completamente las contraseñas y utilizar solo credenciales resistentes al phishing. Desde 2022, la compañía ha permitido a los usuarios eliminar sus contraseñas y utilizar métodos alternativos de inicio de sesión, protegiéndose así de ataques basados en contraseñas. Con las claves de acceso, Microsoft está un paso más cerca de reemplazar las contraseñas con una solución más rápida, segura y fácil de usar, promoviendo un futuro resistente al phishing para todos los escenarios, incluyendo la recuperación de cuentas y el inicio de sesión inicial.

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