Ilustración de un módulo de aterrizaje lunar de la NASA en la superficie de la Luna, en el marco de las misiones Artemis. El módulo, con el logotipo de la NASA visible, está diseñado para soportar las condiciones extremas del polo sur lunar. A su alrededor, se observan dos astronautas realizando actividades en la superficie lunar, con la Tierra visible en el fondo del oscuro cielo lunar.

Astronautas de la NASA se preparan para explorar el enigmático polo sur de la Luna

La NASA se alista para un nuevo y ambicioso aterrizaje en la Luna, previsto no antes de septiembre de 2026. A diferencia de las históricas misiones Apolo, que aterrizaron cerca del ecuador lunar hace más de 50 años, los próximos astronautas de la misión Artemis se dirigirán al polo sur de la Luna, un lugar que alberga condiciones extremas y, crucialmente, depósitos de agua congelada.
Montaje visual dividido en varias secciones circulares. A la derecha, aparece Sam Altman en blanco y negro, con una expresión seria. A la izquierda, se ve una representación abstracta del globo terráqueo, billetes de dólares y un código binario. En el centro de la imagen, hay un ojo humano estilizado, simbolizando el escaneo de iris utilizado en el proyecto Worldcoin de Altman. La composición mezcla elementos de tecnología, dinero y biometría, destacando el vínculo entre la identidad digital y la criptomoneda.

El Worldcoin de Sam Altman está en batalla con los gobiernos por tus ojos

Sam Altman, figura clave en la revolución de la inteligencia artificial y CEO de OpenAI, está impulsando una visión ambiciosa para el futuro a través de su proyecto Worldcoin. Este plan busca crear una identidad digital única para cada persona en el planeta mediante el escaneo de iris, acompañado de una criptomoneda propia. Sin embargo, su proyecto ha encontrado obstáculos significativos en su camino, especialmente por parte de las autoridades globales que cuestionan la viabilidad y la ética detrás de la recolección masiva de datos biométricos.

Las redes sociales convierten a los jóvenes en influyentes políticos sin quererlo

En las recientes elecciones generales, un fenómeno inesperado ha emergido en las redes sociales: adolescentes y jóvenes adultos, sin intención inicial de influir políticamente, se han convertido en poderosos comunicadores de mensajes políticos. Ejemplos notables incluyen a Tolu, una joven de 15 años de Londres, y Will, de 16 años, de Somerset, cuyas publicaciones en TikTok han alcanzado miles de visualizaciones, a veces superando a las de los partidos políticos oficiales.