Un equipo de investigadores suizos ha logrado mejorar la capacidad de caminar de dos personas con lesiones medulares crónicas mediante la estimulación cerebral profunda (DBS, por sus siglas en inglés). Este método consiste en excitar neuronas a través de electrodos implantados quirúrgicamente en el cerebro. Sorprendentemente, los investigadores dirigieron su atención al hipotálamo lateral, una región cerebral asociada a funciones básicas, pero no especialmente a la locomoción.
El estudio, publicado recientemente en Nature Medicine, ha captado la atención de la comunidad científica. Christopher Butson, ingeniero biomédico de la Universidad de Florida, lo describe como un «tour de force» debido a su exhaustividad. Nestor Tomycz, neurocirujano de la Allegheny Health Network y la Universidad de Drexel, también elogia el trabajo, destacando sus implicaciones en campos como la neurocirugía, la neurobiología y la rehabilitación.
El enfoque inicial de la investigación no era el hipotálamo lateral. Según Léonie Asboth, coautora del estudio y directora de investigación clínica en el Hospital Universitario de Lausana, se consideraron todas las regiones cerebrales posibles, destacando aquellas que mostraron cambios anatómicos y funcionales tras una lesión medular. Este análisis condujo a la identificación del hipotálamo lateral como un candidato prometedor para la recuperación de la locomoción.
En estudios con ratones y ratas lesionados, la estimulación del hipotálamo lateral mejoró la recuperación del caminar. Esto motivó la traducción del tratamiento a pacientes humanos. La tecnología utilizada, proporcionada por Medtronic, se basa en décadas de investigación en equipos y técnicas quirúrgicas de DBS. Tras recibir el implante, un paciente expresó sentir «la necesidad de mover las piernas».
Dos pacientes con lesiones medulares incompletas participaron en un programa de rehabilitación de tres meses, utilizando DBS durante aproximadamente nueve horas semanales. La capacidad de caminar mejoró inmediatamente con la DBS activada, y los resultados positivos se mantuvieron incluso con los electrodos desactivados. Ambos participantes lograron caminar sin aparatos ortopédicos y subir escaleras de forma independiente, sin reportar efectos secundarios graves.
La investigación sugiere que la DBS podría ofrecer ventajas significativas para personas con lesiones medulares crónicas, mejorando su calidad de vida y movilidad. El equipo planea continuar con estudios de seguridad y eficacia en más pacientes humanos, explorando también terapias híbridas que combinen DBS con otras técnicas de neuromodulación.