El núcleo de Linux es conocido por ser un entorno de trabajo donde los debates intensos son comunes, y las tensiones entre los desarrolladores no son una rareza. Sin embargo, la reciente renuncia de Wedson Almeida Filho, un líder clave en el proyecto que busca integrar Rust en este núcleo principalmente basado en C, ha puesto en evidencia las dificultades no técnicas que enfrenta este esfuerzo.
Filho anunció su retirada del proyecto en un correo enviado a la lista de distribución del núcleo de Linux, señalando que tras casi cuatro años de trabajo, ya no cuenta con la energía ni el entusiasmo para enfrentar lo que describió como «tonterías no técnicas». A pesar de su decisión, Filho sigue convencido de que el futuro de los núcleos de sistemas operativos radica en lenguajes de programación que garanticen la seguridad de la memoria, como Rust. En su mensaje, advirtió que si Linux no adopta esta tecnología, otro núcleo podría superar a Linux tal como este superó a Unix en su momento.
Uno de los puntos que desencadenó la decisión de Filho fue una interacción en una conferencia de Linux, en la cual Ted Ts’o, un importante mantenedor del núcleo, expresó su resistencia a la obligación de aprender Rust. Este desacuerdo ilustra la resistencia de algunos desarrolladores a cambiar su dominio del código C por uno en Rust, especialmente cuando esto implica una carga adicional de trabajo al tener que mantener ambos lenguajes.
El caso de Filho no es aislado. Asahi Lina, desarrolladora del proyecto Asahi Linux, compartió en Mastodon su comprensión de la frustración de Filho. Lina señaló que algunos desarrolladores del núcleo parecen empeñados en dificultar el trabajo de los mantenedores de Rust, lo que impacta negativamente en la calidad y estabilidad del código del núcleo. A modo de ejemplo, explicó cómo intentó mejorar la robustez del código C relacionado con el Direct Rendering Manager (DRM), solo para ser bloqueada por el mantenedor correspondiente, generando problemas que su código Rust no presenta.
Drew DeVault, fundador de SourceHut, también ha expresado su preocupación respecto a la integración de Rust en el núcleo. Según él, aunque en teoría el núcleo debería estar abierto a contribuciones de desarrolladores motivados, en la práctica, el ecosistema de Linux se asemeja al salvaje oeste, donde lograr consenso es sumamente difícil debido a la gran cantidad de mantenedores con intereses particulares. DeVault sugiere que, en lugar de enfrentarse a estas dificultades políticas, los desarrolladores de Rust podrían considerar construir un núcleo compatible con Linux desde cero.
Por su parte, Linus Torvalds, creador de Linux, adoptó inicialmente una postura de «esperar y ver» con respecto a Rust, confiando en que el lenguaje demostraría su valía en controladores de dispositivos aislados. Sin embargo, recientemente, Torvalds reconoció las quejas de los desarrolladores a favor de Rust, mencionando que la resistencia de los desarrolladores veteranos se debe en parte a la dificultad de aprender un nuevo lenguaje muy diferente al C, y en parte a la inestabilidad de la infraestructura de Rust.
El futuro de Rust en el núcleo de Linux aún es incierto, y aunque los desafíos son evidentes, el tiempo dirá cuánto tiempo más el C seguirá siendo el pilar central del desarrollo en este proyecto monumental.