Fármacos radioactivos atacan el cáncer con precisión
En una mañana de miércoles a finales de enero de 1896, en una pequeña fábrica de bombillas en Chicago, una mujer de mediana edad llamada Rose Lee se encontraba en el centro de un esfuerzo médico revolucionario. Con un tubo de rayos X posicionado sobre el tumor en su seno izquierdo, Lee fue tratada con una oleada de partículas de alta energía que penetraron en la masa maligna. Así, sin fanfarrias, nació la terapia con rayos X.