Australia ha realizado un avance significativo en la navegación con la presentación de un sistema cuántico desarrollado por Q-CTRL que funciona sin necesidad de Global Positioning Systems (GPS). Este nuevo sistema, denominado «Ironstone Opal», se ha demostrado ser 50 veces más preciso que los sistemas GPS tradicionales, abordando preocupaciones críticas sobre la interrumpibilidad y la fiabilidad en entornos de navegación.
El GPS, que actualmente es fundamental para vehículos aéreos, terrestres y marítimos, ha sido objeto de ataques por interferencias, lo que presenta un gran riesgo para la seguridad nacional y los vehículos autónomos que requieren datos de ubicación constantes y precisos. Según un comunicado de prensa de Q-CTRL, las interferencias en el GPS pueden interrumpir hasta 1,000 vuelos diarios, lo que le cuesta a la economía global alrededor de $1 mil millones diariamente.
Principio de navegación sin GPS
El sistema de Q-CTRL se basa en sensores cuánticos que pueden leer el campo magnético de la Tierra, el cual presenta variaciones ligeramente diferentes dependiendo de la ubicación, similar a una huella digital magnética. Estos sensores utilizan magnetómetros altamente sensibles y estables para determinar la ubicación sin emitir señales que puedan ser detectadas o interrumpidas, lo que lo hace pasivo y por lo tanto, a prueba de sabotajes.
Este enfoque innovador incluye un software basado en inteligencia artificial que filtra interferencias como vibraciones o ruido electromagnético, aumentando aún más la precisión durante la navegación. Las pruebas iniciales realizadas tanto en tierra como en aire demuestran que este sistema puede operar completamente de manera independiente del GPS, con un nivel de precisión comparable a acertar en la diana desde 1,000 yardas de distancia.
Demostración de eficacia
En pruebas en vuelo, donde normalmente la interferencia es más intensa, la nueva tecnología superó a los sistemas existentes por al menos 11 veces, marcando un hito en el uso de la tecnología cuántica para aplicaciones comerciales y militares, un logro conocido como «ventaja cuántica». Dada su naturaleza sigilosa, a prueba de interferencias y de alta precisión, esta tecnología debe resultar atractiva para fuerzas militares de países como Australia, el Reino Unido y Estados Unidos, así como para empresas de aviación comercial y vehículos autónomos.
«En Q-CTRL, estamos emocionados de ser pioneros globales al llevar la detección cuántica del laboratorio al campo, habilitando capacidades reales que anteriormente eran poco más que un sueño», declaró el director de la empresa. «Este es nuestro primer lanzamiento importante de sistemas, y estamos entusiasmados con el futuro, donde introduciremos nuevas tecnologías de navegación aseguradas cuánticamente adaptadas a plataformas comerciales y de defensa», agregó.
Con estos desarrollos, Australia no solo se coloca a la vanguardia de la tecnología de navegación, sino que también podría cambiar las reglas del juego en escenarios hostiles, zonas donde el GPS es denegado o en regiones de difícil acceso donde el GPS no funciona efectivamente.