Activision promete «experiencias absolutamente únicas cada año» tras el decepcionante rendimiento de Black Ops 7 en Europa
Activision anunció el martes que los futuros lanzamientos de Call of Duty ya no incluirán entregas consecutivas de las franquicias Modern Warfare o Black Ops. Esta decisión marca un cambio significativo en la estrategia de la compañía después de cuatro lanzamientos seguidos: Modern Warfare II (2022), Modern Warfare III (2023), Black Ops 6 (2024) y Black Ops 7 (2025).
El problema de la fatiga en las franquicias
Según un comunicado oficial de la empresa, Activision busca ofrecer «una experiencia absolutamente única cada año». Esta decisión llega después de que Black Ops 7 recibiera críticas mixtas tras su lanzamiento en noviembre y tuviera un «lanzamiento decepcionante» en Europa, según reporta The Game Business.
Los problemas no eran completamente inesperados. Antes del lanzamiento del juego, Yale Miller, director senior de producción de Treyarch, ya había expresado su preocupación a CharlieIntel sobre que Black Ops 6 y Black Ops 7 fueran percibidos como demasiado similares entre sí.
Una nueva era para Call of Duty
En su declaración oficial, Activision enfatizó su compromiso con la innovación: «Impulsaremos una innovación que sea significativa, no incremental». Aunque la compañía no compartió detalles específicos sobre sus planes futuros, aseguró que revelará más información «cuando sea el momento adecuado».
La empresa también expresó confianza en el futuro de la franquicia, declarando que «el futuro de Call of Duty es muy sólido y creemos que nuestros mejores días están por venir», citando la profundidad y el talento de sus equipos de desarrollo. La «próxima era» de Call of Duty promete entregar «precisamente lo que quieren junto con algunas sorpresas que impulsarán la franquicia y el género hacia adelante».
Competencia creciente en el mercado
Este cambio de estrategia llega en un momento en que Call of Duty enfrenta una competencia más intensa. EA’s Battlefield 6 ha tenido un lanzamiento exitoso, vendiendo más de siete millones de copias en sus primeros tres días y siendo promocionado por EA como «el juego de disparos más vendido del año».
Además, Arc Raiders ha logrado vender más de cuatro millones de copias, demostrando que hay espacio para nuevos competidores en el saturado mercado de los shooters.
El futuro incierto pero prometedor
Con esta nueva estrategia, Activision parece estar reconociendo que la fórmula de lanzamientos consecutivos de las mismas subfranquicias puede estar agotándose. El enfoque en experiencias únicas sugiere un retorno a la diversificación que caracterizó los primeros años de Call of Duty, cuando cada entrega exploraba diferentes períodos históricos y mecánicas de juego.
Aunque los fanáticos tendrán que esperar para conocer los detalles específicos de esta nueva dirección, el cambio representa una admisión de que incluso las franquicias más exitosas necesitan evolucionar para mantener su relevancia en un mercado cada vez más competitivo.









