Un grupo de hackers ha amenazado con filtrar bases de datos de Google a menos que la empresa despida a dos empleados específicos, según una publicación realizada en la plataforma Telegram.
La amenaza y sus demandas
El mensaje, que supuestamente proviene de un grupo de hackers, exige que el gigante tecnológico despida a Austin Larsen y Charles Carmakal, además de suspender las investigaciones del Google Threat Intelligence Group sobre su red.
El grupo se presenta como una red de hackers compuesta por miembros de otras comunidades de cibercriminales, incluyendo Scattered Spider, LapSus y ShinyHunters. Han adoptado el nombre de Scattered LapSus Hunters en referencia a esta alianza.
Los empleados objetivo
Tanto Larsen como Carmakal trabajan en el Google Threat Intelligence Group, la división especializada en amenazas cibernéticas de la compañía.
Falta de pruebas concretas
Es importante destacar que el grupo no proporcionó ninguna prueba de que tuviera acceso real a las bases de datos de Google. Además, no se han reportado filtraciones recientes de información de Google.
Contexto de seguridad reciente
Esta amenaza surge después de que Google informara en agosto que ShinyHunters había obtenido información de Salesforce, una empresa tercera que proporciona algunos servicios a Google. Este incidente previo podría estar relacionado con las actuales amenazas.
Respuesta corporativa
Google no ha emitido declaraciones inmediatas sobre estas amenazas, y la compañía no respondió a las solicitudes de comentarios fuera del horario laboral regular.
Análisis de la situación
La amenaza representa un nuevo tipo de presión cibernética donde los hackers no solo buscan obtener beneficios económicos, sino que intentan influir directamente en las decisiones de personal de las empresas tecnológicas. El hecho de que apunten específicamente al equipo de inteligencia de amenazas de Google sugiere una posible venganza por investigaciones previas o intentos de neutralizar las capacidades defensivas de la compañía.
La coalición de grupos de hackers mencionada también representa una preocupación significativa para la industria, ya que indica una posible coordinación entre diferentes organizaciones cibercriminales que tradicionalmente operaban de manera independiente.
