NASA ha logrado un avance significativo en la búsqueda de vida extraterrestre gracias a un hallazgo del rover Curiosity. Este vehículo ha detectado las moléculas orgánicas más grandes que se hayan encontrado hasta ahora en Marte, lo que podría ser un indicio de condiciones pasadas que favorecieran la vida en el planeta rojo.
Las cadenas de carbono encontradas son un componente esencial para entender la biología, dado que en la Tierra, las moléculas de carbono relativamente complejas están involucradas en procesos biológicos. Los científicos creen que estas moléculas podrían ser fragmentos de ácidos grasos, presentes en las membranas que rodean las células biológicas.
Los investigadores apuntan a que si alguna vez hubo vida en Marte, probablemente fue de naturaleza microbiana. Sin embargo, la detección definitiva de vida es un desafío debido al tamaño diminuto de los organismos, lo que requiere instrumentos científicos más poderosos que los que se pueden llevar en un rover.
Detalles del descubrimiento
Las moléculas orgánicas fueron encontradas en una roca de 3.7 mil millones de años conocida como Cumberland, ubicada en lo que se presume fue un lecho seco de lago en el Cráter Gale. Utilizando el instrumento de Análisis de Muestras en Marte (SAM), los científicos realizaron su descubrimiento.
Originalmente, el objetivo era buscar evidencia de aminoácidos, pero el hallazgo de estas largas cadenas de carbono, que incluye sustancias como decano y dodecano, ha emocionado a la comunidad científica. Estos compuestos son conocidos como alcanos dentro de la categoría de hidrocarburos.
Recientemente, en marzo, otros científicos también presentaron evidencia de características en una roca muestreada por el rover Perseverance, sugiriendo la posibilidad de que presentaran signos de actividad microbiana del pasado, aunque esos datos aún no han sido publicados en revistas revisadas por pares.
El futuro de la investigación
El programa de retorno de muestras de Marte, una colaboración entre NASA y la Agencia Espacial Europea, ofrece la esperanza de que las muestras recolectadas por Perseverance puedan ser traídas a la Tierra para su análisis en laboratorios avanzados. Equipos más sofisticados podrían confirmar la presencia de vida pasada en Marte. Sin embargo, un reciente informe de una junta revisora independiente criticó el aumento presupuestario de la misión, lo que ha llevado a un replanteamiento sobre cómo llevar a cabo el proyecto.
La roca Cumberland fue hallada en Yellowknife Bay, un área del Cráter Gale que presenta formaciones rocosas que parecen formarse a partir de sedimento acumulado en el fondo de un lago, un entorno esencial para la búsqueda de indicios de vida.
Los expertos sugieren que las moléculas de alcano podrían haber sido parte de moléculas de ácidos grasos más complejas. Las evidencias de ácidos grasos podrían iluminar la biografía de Marte, al ofrecer registros críticos sobre su pasado.
Dichos hallazgos en muestras preservadas en rocas antiguas de Marte son vitales para entender la habitabilidad histórica del planeta. Aunque la formación exacta de estas moléculas sigue siendo un misterio, su existencia en condiciones adversas durante millones de años despierta la esperanza en los astrobiólogos de detectar evidencias de vida antigua en el futuro.