Científicos de Harvard han logrado un avance significativo en computación cuántica al atrapar por primera vez moléculas de sodio-cesio (NaCs) utilizando pinzas ópticas en un ambiente ultrafrío. El equipo de investigación, liderado por Kang-Kuen Ni, pudo realizar operaciones cuánticas con estas moléculas, superando desafíos históricos que impedían su uso como qubits.
En el experimento, los investigadores controlaron las interacciones entre moléculas mediante sus dipolos eléctricos, logrando entrelazar dos moléculas con un 94% de precisión. Utilizaron una puerta lógica iSWAP, que permite intercambiar los estados de dos qubits y aplicar un cambio de fase, un paso esencial para generar entrelazamiento cuántico.
Hasta ahora, la computación cuántica se había centrado en iones atrapados, átomos neutros y circuitos superconductores. Las moléculas no se habían usado previamente debido a su estructura interna compleja y movimientos impredecibles. Al mantenerlas en un ambiente ultrafrío y controlarlas con láser, los científicos minimizaron su movimiento y pudieron manipular sus estados cuánticos.
La investigación, publicada en la revista Nature, representa un hito tecnológico que podría abrir nuevas posibilidades para la computación cuántica. Los científicos ven en las moléculas un potencial prometedor para desarrollar computadoras cuánticas más rápidas y eficientes, con aplicaciones potenciales en medicina, ciencia y finanzas.