Casio lanza Moflin, la mascota robótica diseñada para mejorar el bienestar emocional

Casio ha comenzado a aceptar pedidos anticipados de su nueva mascota robótica llamada Moflin, un dispositivo que combina el aspecto de un hámster con el de los Tribbles de Star Trek. A diferencia del perro robótico Aibo de Sony, que está diseñado para seguirte, Moflin tiene como propósito ser una mascota de compañía que puedas abrazar y sostener. Además, Casio asegura que Moflin, gracias a la inteligencia artificial, aprenderá a reconocer a su dueño con el tiempo, generando un vínculo simulado que se manifestará a través de sonidos y movimientos únicos.

Una mujer acariciando suavemente a Moflin, una mascota robótica de pelaje gris y apariencia similar a un hámster o un pequeño animal peludo, mientras está acostada en una superficie plana junto a una hoja de papel. Moflin parece estar interactuando de manera afectiva, proyectando la sensación de ser una mascota acogedora y reconfortante.

Desarrollo y precio de Moflin

El origen de Moflin proviene de una colaboración entre Casio y la startup japonesa Vanguard Industries. Ahora, la fabricación y distribución están a cargo de Casio, y se puede reservar por un precio de ¥59,400 (alrededor de 398 USD). Su lanzamiento está previsto para el 7 de noviembre. Además, Casio ofrece un servicio de suscripción opcional llamado «Club Moflin», con un coste anual de ¥6,600 (unos 44 USD). Esta suscripción incluye descuentos en reparaciones, limpieza y hasta la posibilidad de cambiar el pelaje del robot, considerando que los accidentes pueden ocurrir.

Un enfoque en el bienestar emocional

Moflin no está diseñado para ser un juguete interactivo como Aibo, sino que busca ser una herramienta que proporcione confort emocional, similar al robot Qoobo, un gato robótico sin cabeza. Sus movimientos limitados de cabeza y cuerpo están pensados para dar la sensación de que el robot intenta acurrucarse cuando lo sostienes. Además, cuenta con funciones de inteligencia artificial que mejoran esta experiencia.

La IA de Moflin le permite reconocer a la persona que más interactúa con él, ya sea a través de la voz o el contacto físico, respondiendo con sonidos y movimientos personalizados que simulan un lazo afectivo único. Asimismo, el robot es capaz de desarrollar una personalidad simulada y sentimientos que cambian según el trato que reciba. Si se le presta atención constante, Moflin mostrará comportamientos felices y tranquilos, mientras que si se le ignora, «desarrollará» emociones simuladas de estrés o tristeza. Sin embargo, estos estados emocionales no se manifiestan a través de movimientos o sonidos específicos, sino que se pueden monitorear mediante una aplicación vinculada al robot, lo que lo asemeja a un Tamagotchi moderno, pero sin recompensas digitales.

Diseño y autonomía de Moflin

Para reforzar la ilusión de que Moflin es un ser vivo, en lugar de cargarlo con un cable USB, viene con una pequeña cama donde el robot «duerme» mientras se recarga. Casio estima que la batería tiene una duración aproximada de cinco horas de uso continuo, y una carga de tres horas y media es suficiente para que Moflin esté listo nuevamente como tu compañero de apoyo emocional.

Las últimas noticias en nuestro podcast semanal

Comentarios

No hay comentarios aún. ¿Por qué no comienzas el debate?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.