En los últimos años, las camionetas pickup de gran tamaño, como la Ram 1500, han ganado terreno en Europa. Este fenómeno ha encendido las alarmas entre los activistas de seguridad vial y medioambiental. Según datos de la Agencia Europea de Medio Ambiente, en 2023 la importación de las camionetas Ram aumentó un 20% en comparación con el año anterior, generando preocupación por los peligros que suponen en las carreteras europeas y por su impacto ambiental.
El impacto de las camionetas grandes en la seguridad vial
A pesar de las restricciones medioambientales impuestas por la Unión Europea (UE), estos vehículos masivos llegan al continente a través de una vía legal conocida como «aprobación individual de vehículos» (IVA, por sus siglas en inglés), que les permite eludir ciertas normativas. En 2023, cerca de 5.000 Ram fueron importadas, y aproximadamente el 60% de las aprobaciones IVA en Europa, Noruega e Islandia correspondieron a esta marca. Otros modelos grandes, como la Ford F-150 y la Chevrolet Silverado, también están llegando, aunque en menor medida.
Expertos como Dudley Curtis, del Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte, han pedido prohibir estas camionetas en Europa, argumentando que son demasiado pesadas, altas y potentes, lo que las convierte en un riesgo letal para otros vehículos, peatones y ciclistas. Un estudio del instituto Vias de Bélgica reveló que un peatón atropellado por una pickup tiene un 90% más de probabilidades de sufrir lesiones graves que si fuera golpeado por un automóvil estándar, y casi un 200% más de probabilidades de morir.
El auge de los vehículos grandes y su justificación
Este auge de los vehículos grandes no es nuevo, y se relaciona con una tendencia global en la que los SUV y pickups son cada vez más populares. Las marcas han sabido vender estos modelos como un símbolo de estatus y aspiración, presentándolos como herramientas versátiles capaces de cubrir las necesidades diarias, incluso en entornos urbanos. No obstante, la realidad física detrás de estos vehículos es preocupante. Su peso y altura aumentan considerablemente el riesgo en caso de atropello, sobre todo para niños y personas mayores.
A pesar de las evidencias sobre los riesgos de estos vehículos, solo el 40% de los adultos en el Reino Unido reconoce que los SUV y pickups son peligrosos para otros, según una encuesta de YouGov. Este porcentaje baja al 20% entre los propietarios de dichos vehículos, lo que indica una falta de conciencia generalizada sobre los peligros que suponen.
Esfuerzos por frenar la expansión de las pickups en Europa
Algunas ciudades europeas, como París y Lyon, ya han tomado medidas para frenar el impacto de los vehículos grandes, implementando tarifas de aparcamiento basadas en el peso. Además, activistas están presionando a la Comisión Europea para que endurezca las normativas de seguridad y cierre los vacíos legales que permiten la entrada de estas pickups.
Sin embargo, pese a su creciente popularidad, los vehículos como la Ram 1500 representaron menos del 1% de las nuevas matriculaciones de coches y furgonetas en Europa en 2023. Su impacto en las emisiones de CO2 es considerablemente mayor que el de los automóviles regulares, y aquellos aprobados por el sistema IVA no cuentan para los objetivos de emisiones de la UE. Para compensar las emisiones de una sola pickup, los fabricantes necesitarían poner en circulación tres vehículos eléctricos adicionales.
