Desde que la tarotista Rebecca Scolnick comenzó a leer cartas profesionalmente en 2018, ha sido víctima de suplantaciones en Instagram más de 50 veces. Los estafadores crean cuentas que imitan la suya, usando nombres de usuario casi idénticos y republicando sus fotos, para luego acercarse a sus seguidores con mensajes espirituales falsos. Esta situación ha afectado no solo a Scolnick, sino a muchos otros practicantes de tarot y misticismo, quienes se sienten agotados y frustrados por la falta de acción de las plataformas y reguladores.
Para combatir estas estafas, en marzo de 2023 se lanzó Moonlight, una plataforma creada específicamente para tarotistas, diseñada por Danielle Baskin, una lectora de tarot con experiencia y diseñadora de productos. Moonlight se presenta como una «SaaS para brujas», ofreciendo un espacio seguro donde los tarotistas pueden ofrecer sus servicios sin temor a ser suplantados. La plataforma incluye funciones de programación y pago, lo que aporta legitimidad a un sector a menudo ignorado por las empresas tecnológicas y los reguladores.
Moonlight ha atraído a 25 tarotistas verificados, quienes pasan por un proceso riguroso de selección para garantizar que cumplen con los valores de la plataforma: compasión, inclusividad, integridad y sabiduría. Además de las lecturas profesionales, los usuarios pueden interactuar con barajas de tarot virtuales en salas de chat privadas, replicando la experiencia de una lectura en persona.
La pandemia de Covid-19 exacerbó el problema de las estafas, ya que más personas se interesaron en las prácticas espirituales alternativas. Sin embargo, este crecimiento en la popularidad del tarot en línea también ha traído consigo un aumento en las estafas. Practicantes como Amanda Grace Leo, que ha visto crecer su popularidad en plataformas como TikTok, han experimentado este doble filo: mayor éxito, pero también más riesgos de suplantación.