Los Juegos Olímpicos de París 2024 atraerán la atención mundial con miles de atletas, personal de apoyo y cientos de miles de visitantes de todo el mundo. Sin embargo, no solo los ojos humanos estarán observando; los sistemas de inteligencia artificial (IA) también jugarán un papel crucial en la vigilancia.
El gobierno francés y empresas privadas están implementando herramientas avanzadas de IA y otras tecnologías de vigilancia para llevar a cabo una supervisión exhaustiva antes, durante y después de los Juegos. La magnitud de los riesgos de seguridad ha llevado a describir a los Juegos Olímpicos como «las operaciones de seguridad más grandes del mundo fuera de la guerra».
Para abordar estos riesgos, el gobierno francés, en colaboración con el sector tecnológico privado, ha justificado el uso de herramientas tecnológicas avanzadas de vigilancia y recopilación de datos. La vigilancia planificada incluye el uso de IA experimental en sistemas de videovigilancia, una medida tan extensa que el país tuvo que modificar sus leyes para legalizarla.
El plan no se limita a los nuevos sistemas de videovigilancia con IA. Según informes, la oficina del primer ministro ha negociado un decreto provisional que permite al gobierno aumentar significativamente las herramientas tradicionales de vigilancia e información, como las escuchas telefónicas, la recopilación de datos de geolocalización, comunicaciones y datos informáticos, y la captura de grandes cantidades de datos visuales y de audio.
Si bien las medidas preventivas deben ser proporcionales a los riesgos, los críticos globales afirman que Francia está utilizando los Juegos Olímpicos como una excusa para ampliar el poder de vigilancia y normalizar la vigilancia estatal a nivel social. Existe preocupación sobre la cantidad y el tipo de datos que deben recopilarse y analizarse para detectar eventos específicos, así como sobre la transparencia en el uso de estos sistemas y el destino de los datos recopilados.
Las autoridades francesas, en colaboración con empresas de IA como Videtics, Orange Business, ChapsVision y Wintics, han utilizado la vigilancia con IA en eventos importantes, demostrando su efectividad en conciertos, eventos deportivos y estaciones de transporte. Estos sistemas están diseñados para detectar en tiempo real eventos como cambios en el tamaño y movimiento de multitudes, objetos abandonados, uso de armas, presencia de humo o llamas, y ciertas violaciones de tráfico.
En preparación para los Juegos Olímpicos, Francia promulgó la Ley No. 2023-380, que proporciona un marco legal para el uso de vigilancia inteligente de video y permite el uso de software de IA para revisar feeds de video. Esta ley convierte a Francia en el primer país de la UE en legalizar un sistema de vigilancia tan amplio impulsado por IA.
Sin embargo, esta legislación ha sido criticada por ser contraria al Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) de la UE y a los esfuerzos para regular el uso de tecnologías de IA dañinas. Los críticos argumentan que, aunque se afirma que el software de IA puede cumplir sus objetivos sin identificar a las personas, la captura y análisis de características fisiológicas y comportamientos humanos constituyen datos biométricos, lo que violaría el GDPR.
