En febrero de 2022, Jared Isaacman junto a SpaceX dieron a conocer el Programa Polaris, una iniciativa que busca impulsar de manera significativa las capacidades de los vuelos espaciales humanos y, simultáneamente, apoyar causas importantes en la Tierra.
La misión «Polaris Dawn» representa el primer paso de este ambicioso programa, que constará de tres misiones tripuladas. Está previsto que su lanzamiento hacia la órbita terrestre se realice a más tardar en el verano de 2024. Durante una misión que se extenderá por cinco días, la tripulación llevará a cabo la primera actividad extravehicular (EVA), o paseo espacial, desde la cápsula Dragon de SpaceX. Este evento no solo será el primer paseo espacial de astronautas comerciales, sino que también marcará la primera vez que cuatro astronautas estén expuestos simultáneamente al vacío del espacio.
Un aspecto crucial de esta misión será el uso de un nuevo traje espacial desarrollado por SpaceX, diseñado específicamente para actividades extravehiculares. Este traje es una evolución del traje de actividad intravehicular (IVA) que actualmente utilizan las tripulaciones en las misiones de vuelo espacial humano con Dragon. Fue diseñado pensando en la movilidad; incorpora nuevos materiales, procesos de fabricación avanzados y diseños innovadores en las articulaciones para ofrecer mayor flexibilidad bajo presión, manteniendo la comodidad en escenarios no presurizados. El casco, impreso en 3D, incluye un nuevo visor que reduce el deslumbramiento y un sistema de visualización frontal (HUD) y cámara que informan sobre la presión, temperatura y humedad relativa del traje. Además, se han integrado mejoras en la fiabilidad y redundancia del traje para garantizar su presurización y la seguridad de la tripulación durante el paseo espacial.
Estas innovaciones son parte de un diseño escalable, lo que permite su producción ajustada a diferentes tipos de cuerpos, con el objetivo de facilitar un acceso más amplio al espacio para toda la humanidad.
Aunque «Polaris Dawn» marcará el debut del traje EVA de SpaceX en la órbita terrestre baja, el destino último de estos trajes se proyecta mucho más allá de nuestro planeta. Construir una base en la Luna y una ciudad en Marte requerirá el desarrollo de un diseño escalable para los millones de trajes espaciales necesarios para sostener la vida en múltiples planetas.