La empresa estadounidense Throwflame, con sede en Ohio, ha anunciado la disponibilidad para la compra del «Thermonator», el primer perro robot equipado con un lanzallamas, un producto que había generado gran expectación desde su anuncio el pasado verano. Este innovador robot cuadrúpedo se puede adquirir por un precio de 9.420 dólares.
El Thermonator está equipado con un lanzallamas ARC montado en su espalda, que puede utilizar gasolina o napalm como combustible. Ofrece una autonomía de una hora por carga de batería, y tiene capacidad para lanzar llamas hasta una distancia de 30 pies. Además, cuenta con conectividad Wi-Fi y Bluetooth, lo que permite su control remoto a través de un smartphone.
Entre las características más destacadas del Thermonator se incluyen un sensor LIDAR para la cartografía y la evitación de obstáculos, un sistema de puntería láser y navegación en primera persona (FPV) mediante una cámara integrada. Este robot integra una versión del cuadrúpedo Unitree Go2, cuya configuración base tiene un coste de 1.600 dólares.
Throwflame sugiere varios usos para este robot, entre los que se encuentran el control y prevención de incendios forestales, la gestión agrícola, la conservación ecológica, la eliminación de nieve y hielo, y su uso en entretenimiento y efectos especiales (SFX). Sin embargo, su función más destacada es la capacidad de prender fuego en diversos escenarios reales.
La comercialización de lanzallamas ha sido tema de controversia, especialmente después de que Elon Musk vendiera 10.000 unidades del lanzallamas de The Boring Company en 48 horas en 2018. A pesar de que los lanzallamas no están regulados específicamente en 48 estados de EE. UU., sí existen leyes de responsabilidad de productos y leyes penales que pueden aplicarse a su uso y venta. En estados como Maryland y California, hay restricciones específicas sobre su posesión y alcance.